Sobre el intento de no se sabe qué a Esperanza Aguirre, presidenta de la Comunidad de Madrid.
dos individuos que habían intentado entrar en el domicilio de Esperanza Aguirre, presidenta de Madrid, fueron detenidos, pero la Policía ni siquiera se molestó en interrogarlos. Si eso le ocurre a una de las personas con más poder en España, qué demonios puede ocurrirle a cualquiera de nosotros dada la impunidad para los delincuentes.
Y lo ocurrido a la Juez que ha reabierto investigaciones sobre particularidades del 11-M
la juez que ha reabierto investigaciones sobre algunos aspectos del 11-M denunció que habían forzado la cerradura de la puerta de su domicilio. Y horas después se produjo un misterioso incendio en su casa, propagado por el sistema de ventilación. O intentaban asustarla o pretendían asesinarla.
Y el sospechoso robo de ordenadores en los despachos de los tres administradores concursales que participan en la auditoría de las empresas de Jorge Dorribo por parte de agentes secretos. Dorribo ha acusado a Pepiño Blanco de recibir comisiones a cambio de hacer gestiones en favor de su empresa.
Y qué decir de la juez que destapó el escándalo de Pepiño Gasolineras. Los ordenadores con los datos fueron inmediatamente robados, los agentes secretos se dedicaron a espiarla en vez de perseguir a los delincuentes, han cambiado al fiscal para que el proceso se duerma y su señoría ha tenido que recurrir a oficiales de Aduanas porque no se fía de la Policía
Y el caso Faisán, por todos conocido y que salpica a Rubalcaba,
Bueno, y el lavado de cara del delito gravísimo cometido en el bar Faisán -nada menos que avisar a los terroristas de la inminente visita de la Policía- y los asaltos a varios edificios de Madrid a cargo de bandas de matones indignados y el encuentro de los terroristas y los socialistas para, desde el territorio guipuzcoano ya «liberado», tomar todo el País Vasco según una nueva edición de la burda y clásica tregua trampa y...
Y por último el periodista Javier Neira, hace una reflexión,
¿Qué nombre habría que dar a todo eso? Ustedes dirán, pero está claro que el régimen político español no merece el calificativo de democracia.El nivel de corrupción es tan elevadísimo y contamina de tal manera a las instituciones del Estado que de ninguna manera, ni siquiera como metáfora, se puede decir que España sea una democracia.
VER: POLÍTICA: Indecente
José Sobrado García
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