(VI) La Sanidad Privada inglesa, modelo de la española
En una entrevista realizada a la economista Sally Ruane, doctora de la Universidad de Montfort (Reino Unido), ésta critica el sistema de gestión hospitalaria PFI (Iniciativa de Financiación Privada), el mismo modelo sanitario aplicado por Esperanza Aguirre
EL COSTE
Sus conclusiones sobre este modelo el mismo que el gobierno de Esperanza Aguirre (PP) ha impulsado en la Comunidad de Madrid en el ámbito sanitario son de todo menos alentadoras. Según explica, el modelo PFI (donde una empresa privada construye el edificio y contrata al personal no sanitario) está dejando a las arcas públicas inglesas deudas millonarias.
En Inglaterra el modelo privatizador PFI lleva diez ó 15 años y ha acumulado una deuda pública muy elevada que en 2014 ascenderá a 114.000 millones de euros, a pagar durante los próximos 30 ó 40 años. Además, al ser gestionado en parte por una empresa privada, tiene que generar suficientes beneficios y dividendos para los accionistas.
LA ATENCIÓN SANITARIA
Lo peor es que estos costes tienen que ser sustraídos de los ingresos operativos, lo cual supone un impacto directo sobre la atención sanitaria, sobre los servicios que se dan al ciudadano. Con otro modelo de financiación, no se hubiera buscado el beneficio y todo el dinero se hubiera destinado a la atención sanitaria.
Los hospitales salen muy caros, las condiciones de trabajo han empeorado horriblemente, se han reducido los puestos de trabajo, hay menos servicios para la población... Con la privatización, baja la calidad asistencial.
En Escocia este modelo lo han paralizado e intentan fomentar un fondo alternativo para los desarrollos hospitalarios. Por otra parte, Gales e Irlanda del Norte intentan gestionar sus hospitales de una forma alejada al sistema de mercado.
Manifestaciones de LAV en Sanidad Pública
Por otra parte Lola Gómez Responsable de LAB en Sanidad Pública, manifiesta que la salud de la ciudadanía nunca puede estar sometida a criterios de mercado, ni el modelo sanitario puede ser sólo curativo, porque es mucho más caro e ineficiente y, además, genera exclusión.
En los últimos tiempos estamos viendo, unas veces claramente y otras más sibilinamente, cómo el sistema socio-sanitario público está sufriendo un gran deterioro a favor del sistema privado. Asistimos a un discurso neoliberal que habla de satisfacción de las usuarias, de libertad de elección, de libre competencia... y lo único que hay detrás de esa palabrería es mercado y más mercado, donde la salud es una mercancía en venta al mejor postor. El objetivo es maquinar cómo ganar dinero por medio de los problemas de salud de las personas.
En el Estado español el más claro ejemplo lo tenemos en la Comunidad de Madrid, donde el deterioro de la sanidad pública a costa de desviar dinero público a la sanidad privada es más que patente.
Deberíamos aprender de pueblos como Escocia, en el que el sector público apenas deja sitio para la iniciativa privada, o Gales, en el que la asistencia es cosa de los ayuntamientos.
Ciudadanía, sindicatos, agentes sociales... debemos movilizarnos para conseguir una sociedad más justa y reclamar, por tanto, también una sociedad más sana, no dejando que las y los políticos y especuladores de la salud jueguen con nuestras vidas a cambio de llenar sus bolsillos. Esta es la única forma de acabar con todas estas prácticas de destrucción de nuestro sistema sanitario, en particular, y de todo nuestro sistema público, en general.
EL MANIFIESTO EN DEFENSA DE LA SANIDAD PÚBLICA (Muy esclarecedor):
Publicado por FADSP (Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública).
PULSAR AQUÍ PARA LEER EL MANIFIESTO
VER: (V) El negocio de la Sanidad.
En una entrevista realizada a la economista Sally Ruane, doctora de la Universidad de Montfort (Reino Unido), ésta critica el sistema de gestión hospitalaria PFI (Iniciativa de Financiación Privada), el mismo modelo sanitario aplicado por Esperanza Aguirre
EL COSTE
Sus conclusiones sobre este modelo el mismo que el gobierno de Esperanza Aguirre (PP) ha impulsado en la Comunidad de Madrid en el ámbito sanitario son de todo menos alentadoras. Según explica, el modelo PFI (donde una empresa privada construye el edificio y contrata al personal no sanitario) está dejando a las arcas públicas inglesas deudas millonarias.
En Inglaterra el modelo privatizador PFI lleva diez ó 15 años y ha acumulado una deuda pública muy elevada que en 2014 ascenderá a 114.000 millones de euros, a pagar durante los próximos 30 ó 40 años. Además, al ser gestionado en parte por una empresa privada, tiene que generar suficientes beneficios y dividendos para los accionistas.
LA ATENCIÓN SANITARIA
Lo peor es que estos costes tienen que ser sustraídos de los ingresos operativos, lo cual supone un impacto directo sobre la atención sanitaria, sobre los servicios que se dan al ciudadano. Con otro modelo de financiación, no se hubiera buscado el beneficio y todo el dinero se hubiera destinado a la atención sanitaria.
Los hospitales salen muy caros, las condiciones de trabajo han empeorado horriblemente, se han reducido los puestos de trabajo, hay menos servicios para la población... Con la privatización, baja la calidad asistencial.
En Escocia este modelo lo han paralizado e intentan fomentar un fondo alternativo para los desarrollos hospitalarios. Por otra parte, Gales e Irlanda del Norte intentan gestionar sus hospitales de una forma alejada al sistema de mercado.
Manifestaciones de LAV en Sanidad Pública
Por otra parte Lola Gómez Responsable de LAB en Sanidad Pública, manifiesta que la salud de la ciudadanía nunca puede estar sometida a criterios de mercado, ni el modelo sanitario puede ser sólo curativo, porque es mucho más caro e ineficiente y, además, genera exclusión.
En los últimos tiempos estamos viendo, unas veces claramente y otras más sibilinamente, cómo el sistema socio-sanitario público está sufriendo un gran deterioro a favor del sistema privado. Asistimos a un discurso neoliberal que habla de satisfacción de las usuarias, de libertad de elección, de libre competencia... y lo único que hay detrás de esa palabrería es mercado y más mercado, donde la salud es una mercancía en venta al mejor postor. El objetivo es maquinar cómo ganar dinero por medio de los problemas de salud de las personas.
En el Estado español el más claro ejemplo lo tenemos en la Comunidad de Madrid, donde el deterioro de la sanidad pública a costa de desviar dinero público a la sanidad privada es más que patente.
Deberíamos aprender de pueblos como Escocia, en el que el sector público apenas deja sitio para la iniciativa privada, o Gales, en el que la asistencia es cosa de los ayuntamientos.
Ciudadanía, sindicatos, agentes sociales... debemos movilizarnos para conseguir una sociedad más justa y reclamar, por tanto, también una sociedad más sana, no dejando que las y los políticos y especuladores de la salud jueguen con nuestras vidas a cambio de llenar sus bolsillos. Esta es la única forma de acabar con todas estas prácticas de destrucción de nuestro sistema sanitario, en particular, y de todo nuestro sistema público, en general.
EL MANIFIESTO EN DEFENSA DE LA SANIDAD PÚBLICA (Muy esclarecedor):
Publicado por FADSP (Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública).
PULSAR AQUÍ PARA LEER EL MANIFIESTO
VER: (V) El negocio de la Sanidad.
José Sobrado García