Preparado el camino, los que habían roto -la parte más plural de la izquierda plural unida jamás será vencida- se han quitado la careta: «¡Buaaaa, buaaaa!, ¡queremos pactar, queremos pactar!, ¡era todo broma, era todo broma!, ¡amiguinos otra vez, amiguinos otra vez».
La verdad es que el espectáculo no por repetido deja de ser desternillante.
¿Qué hará sin pacto el aguerrido líder que, dicen, ha dado siete veces la vuelta al mundo gratis total durante los últimos cuatro años?
¿Qué hará el multicomprometido luchador por la causa de los pobres sin el Phaeton de lujo para acudir raudo en ayuda de los necesitados?
¿Qué hará uno que yo me sé para salir diez veces al día en televisión?
Lo dicho, el himno del Principado va a ser sustituido por el simpático «¿Dónde estará mi Phaeton?», que se ajusta como un guante a los usos y costumbres de cierta parasitocracia astur.
José Sobrado García
No comments:
Post a Comment